Ya saben, uno siempre sueña con tener un buen auto; nada de andar manejando autos usados que constantemente necesitan reparación. Tener una casa muy amplia, con todo lo que siempre soñaste (esto, por supuesto, varia de persona en persona. Para qué aburrirlos con mi casa de ensueño). Tener suficiente dinero para vacacionar en cualquier parte del mundo el tiempo que consideres necesario.
Poder llevar a la familia a cenar en un restaurante decente.
Y, sin embargo, ¿qué pasaría si por asares del destino, nunca consigo todas estas cosas?
No quiero escribir este artículo con un ánimo fatalista, negativo, triste. (Una vez una mujer me dijo que le recordaba la tristeza).
Pero supongo que debo prepararme para el fracaso. (¿Quizás los triunfadores nunca piensan en ello?)
Prepararme para saber que quizá y por todos los esfuerzos que ponga en mi cometido, estos sueños nunca se realicen.
Por otro lado, internet dice que nunca hay que abandonar tus sueños, aunque no triunfes en ello. Sí, escribir es fácil, porque si te gusta hacerlo, no importa que no ganes dinero o que nadie te conozca; puedes escribir para pasar el tiempo. Pero, qué tal los sueños de tener un super auto, uno de esos que van de cero a cien en tres punto dos segundos.
Quizás los exitosos nunca piensan en la derrota.
Si pongo toda mi concentración en alcanzar aquello que deseo, ¿puedo alcanzarlos? Quizá los sueños se alcanzan comprometiendo ciertos valores. O solo cambiando de opinión.
Los sueños se alcanzan creyendo que lo que haces es lo correcto.
¿Será?